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Foto: Celta |
Además, toda la jornada se jugará a la misma hora, por lo que habrá que llevarse el transistor a Balaídos, o el móvil en su defecto. Los tiempos cambian. El Celta estará muy atento a lo que haga el Athletic en Las Palmas, y también al partido del Sevilla. Si ellos no ganan, allanarán el camino del Celta, y si lo hacen, lo pondrán un poco más difícil.
Es fundamental cerrar cuanto antes la sexta plaza, para después aspirar a la quinta. Berizzo lo sabe y quiere aislar a sus jugadores del ambiente festivo que se vivirá. Ayer no dio demasiadas pistas sobre el once que pondrá en liza. Sigue la duda entre Sergio y Rubén Blanco en la portería, en defensa será Hugo Mallo el central, y el resto del equipo seguramente se parezca bastante al de San Mamés, aunque Guidetti tiene alguna opción de ser titular, si Orellana juega como mediapunta.
Antes y después del partido habrá fiesta, y durante el mismo la intención de los jugadores de Berizzo es la de divertir a una afición que ha vivido una temporada de ensueño que no se empañará fácilmente.
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