La renovación de Gustavo Cabral

Foto: Lalo R. Villar

Los próximos meses van a ser claves para el Celta. El trabajo de su dirección deportiva marcará el futuro de la entidad a corto y medio plazo. Se prevén salidas de jugadores importantes que habrá suplir con los recambios adecuados. Si algo ha hecho muy bien el club en los últimos tiempos ha sido blindar, en mayor o menor medida, a sus jugadores importantes, que pueden salir pero dejan réditos en la caja. 

A otros jugadores tal vez no se le dio la importancia que tienen actualmente a la hora de renovarle. Un buen ejemplo puede ser el de Gustavo Cabral. Cuando hace dos años terminaba su contrato, más de uno pensaba que el Celta no le renovaría. Lo hizo con intriga, ya que esperó a que terminase la temporada para realizar la oferta de renovación. 

Dos años después la situación es similar, pero muy distinta. Cabral es ahora titular indiscutible y el líder de la zaga, además de ser el segundo capitán del equipo tras Hugo Mallo. Además empiezan a sonar con excesiva frecuencia rumores de equipos que quieren hacerse con sus servicios. El último llega desde Italia, concretamente desde la Lazio, que pretende apuntalar su defensa con el argentino. 

Así pues el Celta tendrá que trabajar en los próximos meses para cerrar su continuidad. Tiene una opción unilateral para ampliar su contrato un año más, y lo lógico es que la ejecute, pero sería solo un año y estaría en la misma situación, por lo que le ofrecerá algún año más para asegurarse su continuidad. Es curioso como un futbolista puede dar la vuelta a su situación en un equipo. De prescindible para una gran parte de la afición, a renovación necesario en cuestión de un par de años.