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| Foto: LFP |
Es muy probable que la aventura de Hugo Mallo como central del primer equipo haya terminado con el partido de ayer en Granada. Sergi Gómez ya está recuperado y muy pronto Berizzo también podrá contar con Andreu Fontàs. Las urgencias en el eje de la zaga habrán desaparecido y Hugo Mallo podrá volver al lateral derecho, donde se ha convertido en uno de los mejores de la Liga española.
Pero si su periplo como central termina no es porque no haya hecho merecimientos para seguir. El de Marín ha logrado que su equipo deje la portería a cero en los dos partidos en los que ha ejercido como central. No es fácil teniendo en cuenta que el Celta no encadenaba dos partidos sin encajar en la Liga desde el mes de febrero. Además, no solo no encajó, sino que sus rivales apenas tuvieron oportunidades claras.
A Hugo Mallo, que jugó de central hasta juveniles, no se le ha olvidado una posición que desempeñó durante su estancia en las categorías inferiores del Celta con cierta asiduida. El de Marín demostró ser una solución muy confiable para una posición muy delicada y en la que se han acumulado las bajas por sanción y lesiones en las últimas semanas. Con jugadores como Hugo Mallo todo es más fácil.
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