Carta abierta a Augusto, por Víctor Pérez Currás

Foto: Salvador Sas

Tenemos a vuestra disposición nuestro correo, siempre que queráis y para lo que queráis. Víctor Pérez Currás se ha puesto en contacto con nosotros para enviar una “carta abierta” a Augusto Fernández, que quiere compartir con todos vosotros. 

Oh capitán, mi capitán:
Hace tan solo 5 meses, en un ataque de ira después de la marcha de Santi Mina al Valencia (posado pre-firma incluido) tuiteaba un rotundo “hay más celtismo en los huevos de Augusto Fernández que en este cani sin la ESO”. Porque esa era la sensación que había en el ambiente. Era la sensación que tú mismo retransmitías en el campo, en la sala de prensa, en las redes sociales.
Fuiste quién, en su primera temporada en España, y después de haber sido llamado “lento” durante la primera vuelta; se echó un equipo y una afición a la espalda para hacernos soñar con un 4’01% (im)posible. Meses después, ya como capitán por delante de una leyenda viva del club como era Borja Oubiña; te elegíamos como mejor jugador celeste en 2013 con un 35% de los votos. Te vimos luchar por un puesto en tu selección y todos fuimos un poquito más argentinos en aquel verano de 2014, soñando con tener un Campeón del Mundo liderando nuestro equipo. Tu sacrificio por el equipo y tu honor quedaron más que claros con el caso Gil Manzano. Este mismo mes de mayo se anunciaba tu prolongación de contrato hasta 2019, y reiterabas tu intención de empezar y acabar la temporada en Vigo, ya que tu familia estaba muy a gusto aquí y tú también.
Así has estado en estos ya 3 años y medio, superando cambios de entrenador, sistema de juego, compañeros, posición y el centenar de partidos con ese 24 a la espalda que tantos celtistas han acabado por añadir a su armario. Incluso dos de tus hijos han nacido en la ciudad y se sienten parte del equipo.
Y ahora, justo en una de las temporadas más ilusionantes de nuestra historia, a punto de batir el récord de puntos histórico en una primera vuelta, con el equipo más competitivo de los últimos 10 años y sin miedo a nada, parece que te bajas del barco.
Como seguidor de fútbol, diría que es una pérdida muy sensible para el equipo; ya que eres casi insustituible por lo que aportas.
Como celtista, te pediría que te quedaras, al menos hasta junio.
Pero como admirador tuyo, simplemente te pido que sea cual sea tu decisión, la asumas públicamente y no manches esa reputación que te has ganado en estos años. Porque Balaídos no olvida, ni para bien (afortunadamente) ni para mal.

Gracias por todo capitán, en nombre del celtismo.