Foto: EFE
No es ningún descubrimiento, pero conviene recordar de vez en cuando aquella expresión utilizada por Jorge Valdano cuando afirmó que el fútbol es un estado de ánimo. El estado psicológico influye de un modo decisivo en el comportamiento deportivo y en este aspecto Balaídos vivirá este sábado un partido entre equipos con trayectorias bien distintas. El Celta está viviendo un momento extraordinario con su tercer puesto liguero y practicando un fútbol ofensivo con la máxima entrega. Por su parte, el Valencia llega séptimo tras la debacle en Champions y con muchas dudas.
Armonía celeste a excepción del polémico césped y los rumores sobre Nolito
La armonía preside la situación deportiva del Celta, exceptuando la polémica con el Concello de Vigo por el mal estado del terreno de juego y los habituales rumores sobre la marcha de Nolito al Barcelona. El equipo de Berizzo está firmando un inicio liguero espectacular con 21 puntos en 10 partidos, a sólo tres del liderato madridista. Apenas ha perdido un encuentro, precisamente frente al Real Madrid en Balaídos, y su determinación por la victoria le ha servido para ganar muchos partidos. El buen ambiente reina en el vestuario y la atmósfera invita a continuar en esta línea.
La debacle en Champions acrecienta las críticas a Nuno
Mientras tanto, el rival céltico de este sábado visita Vigo con unas perspectivas mucho más pesimistas. Exigido por su historia y por un entorno que no se relaja nunca, el conjunto ché ocupa la séptima plaza clasificatoria en Liga con 15 puntos. Su mayor fortaleza en Mestalla ha facilitado estos números, ya que sólo ha sumado cuatro a domicilio. Viene de hacer el ridículo en el campo del Gent, complicándose su continuidad en la Champions y con numerosas críticas a Nuno por su manera de dirigir al equipo. El portugués ha relegado al ostracismo a Negredo y su actitud está provocando que muchos aficionados pidan su marcha. Veremos si la cabeza también juega en Balaídos.
Twitter: @marcosblancoh
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