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| Foto: Goal.com |
Daniel Martin Alexandre, futbolísticamente conocido como Dani, abandona el fútbol. A pesar de no haber cumplido todavía los 32 años, el futbolista sevillano deja el fútbol hastiado por tanta lesión como ha sufrido en los últimos tiempos. Puede que los aficionados que se hayan incorporado en los últimos tiempos al Celta no sepan quien es este jugador, pero los que llevan más de un lustro siguiendo al Celta conocerán bien a Dani.
No en vano, hace unos años ocupó el podio entre los jugadores más odiados por los lectores de la web, compartiendo privilegido con Lionel Scaloni y Salva Ballesta. Dani, especialmente en sus tiempos en el Betis, se caracterizó por su juego subterráneo, totalmente invisible para los árbitros, y desquiciante para los rivales. A lo largo de su carrera se enfrentó diez veces al Celta, cinco de ellas con el Betis, dos con el Cádiz, y tres con el Recreativo de Huelva. Curiosamente, fue el conjunto céltico al que más se midió como rival a lo largo de sus años como profesional. Marcó tres goles, ninguno curiosamente con el Betis, todos ellos con el Cádiz y en la Temporada 2007-08.
En todos los partidos en los que participó Dani hubo cosas feas. En el primero, jugado el 24 de febrero de 2002, ganaron los andaluces (4-1) y fue expulsado Mostovoi. El hoy compañero de Iago Aspas en el Liverpool, José Enrique, fue otra de las víctimas de Dani, en este caso en un partido de Copa disputado en Balaídos. Acabó desquiciado y cayó en sus provocaciones siendo finalmente expulsado. El Celta caería eliminado y en gran parte gracias a la picardía de Dani. Un futbolista que jamás pasó desapercibido, y al que se le criticó mucho que usase en exceso el recurso de la picardía. En fin, ahora que se va, desearle lo mejor en la vida que le queda por delante. A diferencia de otros "odiados" por el celtismo, lo suyo se circunscribió siempre al terreno deportivo.
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