![]() |
Foto. Ricardo Grobas |
El fútbol tiene
cosas inexplicables. Una de ellas es que un equipo con 31 puntos, a falta de
tres jornadas para la conclusión del campeonato, cuente con opciones reales de
salvar la categoría. La vorágine recíproca de indultos lo explica. Cuando uno
aparece al borde del abismo, rápidamente llegan los demás para minimizar los
problemas ajenos con errores propios, para suavizar los golpes que acusa el
rival con batacazos tanto o más pronunciados.
El Celta perdió la
luz el miércoles, cuando el Atlético de Madrid machacó muchas de sus ilusiones
en un partido cargado de impotencia. Sobrevivía sostenido por un pequeño hilo
de vida, cimentado sobre la esperanza casi utópica de lograr 9 puntos de 9
posibles. El fin de semana ha aumentado la iluminación. Zaragoza, Mallorca y
Deportivo se han dejado puntos por el camino, sólo el Osasuna toma distancia.
Los celestes tienen ante sí la enésima oportunidad de no perder un tren que
viaja despacio, a paso lento y que parece empeñado en no apearles del vagón.
Eso sí, ya no habrá más. La del Benito Villamarín será la última opción, la
última bala que disparar. Por mucho que los adversarios perdonen, llega un
momento en el que el fútbol exige aciertos y ese momento ha llegado. Las
matemáticas no descienden al conjunto olívico con un pinchazo, pero sí lo dejan visto para sentencia. Sólo una victoria lo mantiene con vida, sólo un triunfo
conserva la infinita ilusión del celtismo en que su equipo haga un pleno de
victorias en las tres jornadas que restan.
El reto se
afrontará con bajas en la artillería. Ni Park ni Bermejo, lesionado de larga
duración, podrán estar ante el Betis, dejando a Aspas como único delantero nato
habida cuenta de que Abel Resino ha preferido no convocar a Santi Mina y
dejarle así disputar la final de la Copa de Campeones de categoría juvenil. En
línea de tres cuartos, Álex López es la otra ausencia debido a la acumulación
de amonestaciones, con lo que se abre un debate acerca de quién debe ocupar la
mediapunta. Orellana parece que parte con ventaja frente a otras opciones como
las de De Lucas, Pranjic, Toni o incluso Madinda. Es la principal duda de un
once completamente definido en las restantes demarcaciones.
Javi Varas estará
en portería con la línea defensiva habitual de los últimos encuentros compuesta
por Jonny, Vila, Túñez y Roberto Lago. Oubiña y Natxo Insa repetirán en el
doble pivote con Augusto Fernández y Michael Krohn-Dehli en las alas. Aspas
actuará como delantero centro, mientras que el chileno Fabián Orellana ejercerá
labores de enganche.
Por su parte, el
choque para el Betis no es tan dramático como en el bando opuesto, pero sí que guarda
una relevancia notable. Los verdiblancos llevan toda la temporada luchando por
colarse en uno de los puestos que dan acceso a Europa y están más cerca que
nunca. Precisan de un triunfo que los aleje del Getafe y deje al eterno rival, el
Sevilla, como único adversario serio para disputar esa séptima plaza. Jorge
Molina, con un esguince de tobillo, es la principal ausencia del conjunto
andaluz, el cual no atraviesa su mejor racha de la temporada –no gana desde
hace más de un mes- y se está mostrando un tanto irregular en su feudo, el
Benito Villamarín.
Los de Pepe Mel
saldrán de inicio con Adrián en portería, Chica y Nacho en los laterales y la
pareja Mario-Amaya en el centro de la defensa. Doble pivote para Rubén Pérez,
que le ha ganado la partida a Cañas, y Beñat. Mientras que el tridente
compuesto por Campbell, Juan Carlos y Pabón ocuparán un frente de ataque
liderado por el peligrosísimo Rubén Castro.
Teixeira Vitienes,
del comité cántabro, impartirá justicia en un partido que marcará el devenir
del Celta. En función de lo que ocurra en Sevilla, las dos últimas jornadas del
campeonato serán dos nuevas finales o dos auténticos trámites en un duro y
lento camino hacia el descenso. La Liga ha dado una nueva oportunidad al Celta,
pero esta vez tiene visos de ultimátum. O se gana o ya no se podrá evitar un
destino que estuvo escrito demasiadas veces y que, afortunadamente, todavía puede
no convertirse en realidad.

0 comments:
Publicar un comentario