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Fernando Vázquez ha sido presentado de forma oficial como nuevo entrenador del Deportivo de La Coruña, en un acto en el que estuvo acompañado por el presidente, Augusto César Lendoiro, y por la directiva coruñesa al completo. El técnico llega acompañado por el preparador físico Manuel Pombo y firma un contrato por los cinco próximos meses, hasta el 30 de junio, con una cláusula de renovación automática por una temporada en el caso de que consiga salvar al Deportivo. Lendoiro desveló que todavía falta la firma del administrador concursal para cerrar de forma definitiva la salida de Domingos Paciencia, el anterior entrenador, pero espera que ese detalle se concrete de forma inmediata.
Fernando Vázquez reveló que con su llegada al Deportivo cumple un sueño, aunque se mostró consciente de que la situación deportiva del equipo coruñés es más que delicada, como colista de la Liga BBVA y a seis puntos de la salvación. "La verdad es que me siento incluso un poco emocionado, porque llegó mi oportunidad y espero no defraudar a nadie en un momento complicado, aunque tengo claro que nada es imposible y la idea ahora es ganar ocho partidos", reconoció Vázquez. El nuevo entrenador del Deportivo destacó que sus cualidades como técnico encajan bien en las necesidades que tiene ahora el equipo, que está muy tocado en el terreno anímico por los últimos resultados.
"Siempre se me dio bien el hecho de hacer resurgir equipos, hacerlos revivir, porque estas situaciones las controlo bien y pienso que voy a conseguir que el Deportivo se transforme en cuanto a rendimiento en algo mejor de lo que está haciendo actualmente", aseguró. Vázquez analizó lo que espera conseguir de su equipo durante estos cinco meses, después de haber tenido la oportunidad de seguir desde la distancia el rendimiento del Deportivo. "Cualquiera que mire los datos del Deportivo, puede ver que lleva 48 goles en contra y eso es algo inasumible, así que mi idea es conseguir un equipo compacto, serio y difícil de batir, algo que no quiere decir que vayamos a poner el autobús delante de la portería, sino que quiero más que nada un conjunto alegre, pero que sea duro y muy competitivo", subrayó.
El técnico llevaba seis años sin entrenar a ningún equipo, desde que abandonó el Celta en abril de 2007, y confesó que ése ha sido un factor más de motivación en su llegada al Deportivo. "Dos de esos años no quise entrenar, pero a partir de ahí, no lo hice porque las ofertas no me convencían o porque los clubes no me querían contratar, así que vengo aquí para invertir en mí mismo y para demostrar que sigo vivo, porque alguna gente podía pensar que no quería entrenar", añadió.
EFE
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