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| MARTA G. BREA |
Orellana sigue esperando el acuerdo entre el Granada y el Celta para instalarse de nuevo en Vigo y jugar con quienes disfrutó de una temporada que llevó a los célticos a Primera División. El club nazarí, sin embargo, pretende aprovechar todas sus bazas para sacar el mayor beneficio económico a un jugador que le costó 3,2 millones de euros. Desde el Granada expresan que su prioridad es traspasar a Orellana antes de formalizar una cesión con cargo, en la que se estipularía una cantidad y el club que se lleve al futtbolista chileno ahora tendrá una opción de compra en junio.
El club que preside Quique Pina insiste en que el Celta no ha presentado una oferta por el jugador. Desde Vigo, en cambio, aseguran que se pidió al club granadino que pusiese precio por Orellana. La primera cifra fue de 3 millones de euros, para rebajarla hasta 2,8 millones en la siguiente aproximación. Al Celta le parece desorbitada la cuantía que se solicita por el internacional chileno, al que ayer el Granada le impidió hablar con este diario.
Faro de Vigo
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