La borrasca del norte

JORGE SANTOMÉ

Celta y Deportivo afrontan el clásico gallego del sábado después de caer ante el Real Madrid y el Barcelona. En la clasificación, los célticos superan en tres puntos a los deportivistas. Las diferencias son mínimas, pero los de Oltra llegan con más urgencias al derbi tras encadenar cinco derrotas. Otro tropiezo podría ocasionar una borrasca en el norte.

El clásico del fútbol gallego vuelve a celebrarse en Primera División, tras cinco años de paréntesis. La última vez que ambos equipos se vieron las caras en la máxima categoría fue el 15 de abril de 2007, cuando el conjunto vigués, dirigido entonces por Stoichkov, derrotó a su eterno rival con un tanto del brasileño Baiano. Esa victoria no evitó, sin embargo, el descenso del conjunto celeste, que se prepara para recibir a un rival que se encuentra en la zona de descenso.

Ambos llegan al derbi en situaciones diferentes. El Deportivo está más apurado en la clasificación -es antepenúltimo, con un punto más que el colista-, después de acumular cinco derrotas consecutivas. Los de Oltra sólo ganaron el partido inaugural del campeonato, ante Osasuna, y a continunación no pasaron de sumar tres empates en siete encuentros.

El Celta cuenta con nueve puntos, que le dan para situarse en la decimotercera posición. Es verdad que los de Herrera continúan sin puntuar a domicilio, pero en casa se han hecho fuertes y han convertido Balaídos en un fortín, donde solamente el Málaga los derrotó en el debut liguero.

Así las cosas, los deportivistas acuden a Vigo más apurados que su rival. Una derrota incidiría más en las críticas hacia la labor que desarrolla su técnico en el manejo de la plantilla. Los célticos, de lo contrario, cuentan con margen para soportar un tropiezo en un derbi que resultó desfavable a sus intereses en la anterior temporada. Con ambos en Segunda División, los de Oltra ganaron primero en Riazor (2-1) y más tarde en Balaídos (3-2). Ambas derrotas hirieron, sobre todo, al celtismo.

Pero eso ocurrió en la categoría de plata. En Primera, los últimos enfrentamientos han sido favorables al conjunto vigués. Antes de la derrota del Dépor en Balaídos por el Celta de Stoichkov, el conjunto coruñés también cedió los tres puntos en Riazor gracias al tanto de Nené. Un triunfo en el estadio coruñés que la afición viguesa también había celebrado la temporada anterior (2005-06), cuando su equipo derrotó al Dépor por cero goles a dos.

Jaime Conde / Faro de Vigo