Joan Tomás, el lado positivo de la derrota

Joan Tomás tuvo ayer su primer oportunidad como titular en Liga. El catalán, que ya había sido titular ante los canarios en el partido de Copa, saboreó la titularidad en la competición de la regularidad, actuando como mediapunta, figura que ha quedado desierta tras la marcha de Roberto Trashorras. El centrocampista celeste es lo más parecido al de Rábade que hay en la actual plantilla celeste y es un desperdicio tenerlo en el banquillo.

Eso debió pensar Herrera que confió en él y le dio la manija del centro del campo. Sin hacer un partido del otro mundo, el catalán cumplió sobradamente. Asistió de manera magistral a David en el gol celeste y se movió muy bien entre líneas buscando los escasos huecos que permitía la zaga canaria. En la víspera del partido ya comentábamos que le tenía la medida al conjunto amarillo, y aunque no sirvió, los mayores apuros de la defensa rival partieron de sus botas.

De hecho, su cambio cambiaría radicalmente el partido, ya que el equipo se descosió tras su salida. Joan Tomás ejercía de perfecto enlace entre los pivotes y la delantera, y la entrada al campo de Iago Aspas, otrora revulsivo válido, dejó al equipo muy partido, tal vez por la anarquía que le da esa genialidad al de Moaña. La derrota es la parte negativa del partido y la demostración de que Joan Tomás es un mediapunta más que interesante, seguramente sea lo más positivo. A eso tenemos que agarrarnos, que el resultado no confunda a Herrera, tiene que seguir confiando en él.